Invitado de lujo

Nikita Mazepin, piloto de la Fórmula 1, asistió al partido entre Pumas y Bravos de Juárez en Ciudad Universitaria. A pocas semanas de que se corra el Gran Premio de la Ciudad de México, el piloto ruso aprovechó su estancia en tierras tricolores para disfrutar un partido de la Liga MX. Mazepin se dejó ver viviendo del momento y aprovechó para lucir la camiseta felina y charlar con parte del equipo universitario. El domingo 7 de noviembre se llevará a cabo el Gran Premio de la Ciudad de México en lo que promete ser un gran espectáculo enorme, tras su cancelación el año pasado por el Covid-19.

Los bombos y trompetas regresaron a Ciudad Universitaria. Pasó más de año y medio para que la Goya volviera a sonar con potencia previo a los partidos de Pumas como local, la cerveza no faltó para algunos aficionados, pero sobre todo, su amor por el futbol y las ganas de regresar al estadio para alentar a los suyos, en busca de convertirse en ese plus que los felinos necesitan para llegar al repechaje y pelear por el título.

Los tacos de canasta también son una tradición cada que se visita el Olímpico Universitario, las bicicletas volvieron a verse rodeadas de gente. La apertura del inmueble también significó un beneficio para las familias dedicadas al comercio.

Ya dentro del histórico recinto, los aficionados no se cansaron de apoyar e impulsar a los Pumas en todo momento, era necesario ese empuje, ese grito que siempre hace que los jugadores den un poco más en el terreno de juego. Al final funcionó,

9 MIL AFICIONADOS ASISTIERON AYER A CU, LUEGO DE MÁS DE UN AÑO

porque los locales fueron capaces de sacar el resultado en el ocaso del duelo ante los Bravos de Juárez.

Una de las grandes sorpresas que se dio en el estadio fue la presencia del piloto de Fórmula 1, Nikita Mazepin, quien aprovechó la cercanía del Gran Premio de Estados Unidos para tomarse unas pequeñas vacaciones en México, siguiente fecha del calendario del Gran Circo, luego de la carrera estadounidense.

Ciudad Universitaria volvió a ser el carnaval que suele ser, esa fiesta y alegría para todos los aficionados de Pumas. El Olímpico Universitario reabrió sus puertas, fue el último inmueble en hacerlo, pero la espera valió la pena.