COMO EN FERIA

SE TOPÓ CON EL INTER DE MILÁN, ASÍ COMO UN PAR DE DECISIONES ARBITRALES QUE GENERARON POLÉMICA

ilán, Italia.- Apareció la mejor de las versiones del Inter de Milán, que acabó encerrado atrás para frenar al Barcelona, que complicó su presencia en los octavos de final de la Champions League tras caer 1-0, eso sí, en un partido marcado por la polémica que generó la anulación del gol de Pedri González y la decisión del VAR de no señalar penalti por una mano de Denzel Dumfries.

El estadio de San Siro fue sede del duelo correspondiente a la fecha 3, en el que el Inter de Milán fue de menos a más y aprovechó su momento de dominio para volver a vencer al Barcelona 12 años después.

Ambos equipos saltaron al césped con ideas muy claras y trabajadas. El Barcelona tuvo el balón, en parte porque el Inter de Milán se lo cedió a la espera de una ocasión para salir rápido al contragolpe, razón por la que Simeone Inzaghi colocó a Joaquín Correa junto a Lautaro Martínez en lugar de Edin Dzeko.

Los primeros minutos fueron un auténtico monólogo del club español, con posesiones largas, aunque sin generar peligro frente al arco rival.

MAÑOS PASARON DESDE LA ÚLTIMA VICTORIA DEL INTER FRENTE AL BARCELONA

Sin embargo, con el paso de los minutos, el Inter de Milán fue creciendo y sintiéndose cómodo al contragolpe, sobre todo de la mano de su afición, que no dejó de apretar.

Al minuto 23, el defensor Eric García cometió una mano dentro del área, pero el VAR no marcó penalti por fuera de juego de Lautaro Martínez.

Fue entonces que el Barcelona comenzó a dudar de su plan y el Inter de Milán creyó más que nunca. Federico Dimarco y Alessandro Bastoni cerraron con habilidad el paso por el costado izquierdo, mientras que Stefan De Vrij y Milan Skriniar apagaron al delantero Robert Lewandowski.

Llegó el segundo aviso del Inter de Milán, cuando Correa se plantó solo ante el portero Marc André Ter Stegen, a quien regateó para anotar, aunque en otro fuera de juego.

El Inter de Milán no era el mismo de los primeros minutos ni era el de la Liga italiana; mientras que el Barcelona tampoco era el de los primeros minutos ni el de la Liga española, de la que es líder.

A la tercera llegó la vencida para el cuadro italiano. Ya en tiempo de compensación del primer tiempo, Hakan Calhanoglu encontró un balón suelto en la frontal del área, superó por abajo a Ter Stegen y abrió el marcador.

El Barcelona reaccionó tras el descaso, mediante un tiro de Ousmane Dembélé que se estrelló en el poste al minuto 60.

Xavi Hernández decidió mover el banco de suplentes del Barcelona con el ingreso de Ansu Fati en lugar de Raphinha.

Mejoró al tiempo que el rival poco a poco se hizo pequeño, hasta que al minuto 67 llegó el gol, luego de que Dembélé consiguió superar por primera vez a Dimarco y llegó a línea de fondo, desde donde sacó un centro que el portero André Onana tocó pese a su mala salida; el balón acabó en los pies de Pedri, quien sólo tuvo que empujarlo.

Pero el VAR llamó de nuevo al árbitro, quien revisó la jugada y vio una mano de

Ansu Fati antes de que el balón llegara a pies de Pedri.

La decisión de anular el gol generó las protestas de los visitantes, especialmente de Xavi, quien fue amonestado.

Estoy indignado, el árbitro debería dar explicaciones de por qué no marcó penalti. A mí no me las ha dado. Por eso creo que es injusto. Nos quedan tres finales y lo vamos a intentar”

XAVI HERNÁNDEZ DT BARCELONA